Gancho Legajador Expediente Marfil Plástico por 20 Unidades Durables. No se oxidan. No mancha los documentos. Seguros sin bordes cortantes. Capacidad para archivar 500 hojas. Para archivar en 7 y 8cms de distancia entre agujeros. Para saber la importancia del gancho legajador expediente revisemos una breve historia de los archivos Los primeros archivos En estas épocas donde el gancho legajador expediente no existía, se las ingeniaron muy bien para que este conocimiento llegara hasta nuestros días La historia de los archivos y su documentación puede remontarse a la aparición de la escritura, puesto que excavaciones arqueológicas en Tell Hariri, Nipur, Ras-Shamra y Egipto han dejado muestra de la existencia de archivos en la antigüedad. Los que había en estos primeros archivos contenían documentación legal, padrones, censos, títulos de propiedad, registros de soldados y documentación privada. A fin de cuentas, la documentación era una herramienta de control de la población y de la riqueza. Estos primeros documentos eran principalmente tablillas de arcilla sobre las cuales los babilonios, sumerios y arcadios escribían usando la escritura cuneiforme. Otras veces se escribía sobre pieles, madera o marfil, y los egipcios también sobre papiro. Grecia En Grecia y en Roma los archivos son anteriores a las bibliotecas, y esto se debe a la propia manera de entender la cultura y la diferencia entre libro y documento. La escritura se considera un bien común, un instrumento de divulgación. Así mismo, la escritura está vinculada al funcionamiento de la política en los estados, y se habla de archivos organizados una vez la polis ya ha madurado, que en Grecia ocurre en el siglo V a.C. En este momento, los primeros depósitos documentales dependían de las diferentes magistraturas que estaban instaladas en el “Archeion”, donde estaba la sede. En el siglo IV a.C. se produce una centralización de los documentos públicos de Atenas, y el archivo central fue el “Metroon” (dedicado a Rea/Cibeles). Era un lugar de conservación abierto a consultas, e incluso se podía obtener copias y reproducciones de los documentos. Como los templos tenían un fuerte carácter sagrado, se hace referencia a que era un lugar de garantía y credibilidad (“loca credibilia”). Roma En el periodo entre los siglos VII-V a.C. ya hay archivos vinculados a la República, por lo tanto, antes que en Grecia. En estos tiempos se definen los mecanismos de producción del documento público, que consiste en el depósito de una copia en el archivo de la institución correspondiente. A diferencia de Grecia, en Roma existía una extensa red de archivos, ya que paralelamente a la creación de las provincias se habían ido formando los archivos. En el siglo V a.C. se crea el “Tabularium”, que se convierte en el archivo público más importante y está vinculado al templo de Saturno (también es considerado un “loca credibilia”). Además de la red de archivos de Roma se puede mencionar la existencia de archivos de distinta tipología: archivos provinciales, municipales, militares, religiosos, … En cuanto a los archivos privados, en Roma existían pero eran un lujo que solo podían permitirse las familias adineradas. Estos archivos se situaban en una parte de la casa que recibía el nombre de “Tablinum”, aunque los documentos más importantes seguían llevándose al templo, caso de los testamentos. A día de hoy, la información que tenemos sobre estos archivos es generalmente indirecta aunque abundante, por una parte procede de los autores clásicos, y por otra, de restos arqueológicos. Alta Edad Media. La convergencia en las prácticas de la conservación bibliográfica y documental Entre los siglos VII y XI finaliza la distinción entre los términos archivo y biblioteca. Esto se debe a que tanto la producción como la conservación de los libros se monopoliza por la Iglesia. Además, se constituyen como espacios de conservación que pierden sus funciones como lugares activos de uso de documentos y libros. Por eso, los libros van a verse como tesoros, porque tienen precios elevados. Los documentos, por su parte, van a significar la garantía de aspectos jurídicos. Siglos antes, al caer el Imperio Romano de Occidente tiene lugar la desaparición de la distinción entre lo privado y lo público. Incluso el estado no es considerado cosa pública o más bien patrimonio de los gobernantes. En el Código de Justiniano (s. VI) se marcan las competencias legislativas: podrían tener archivos los emperadores, reyes o papas, además de los archivos de los reinos germánicos. El archivo es el lugar en el que el rey guarda sus documentos, pero también lo relativo al Estado, ya que el rey lo concibe igualmente como suyo. En estos documentos se recogían sus propiedades, derechos y privilegios. La Iglesia tenía reconocido el derecho de adquirir bienes y propiedades, por ello, tenían documentos que garantizaban la posesión de dichos bienes. Eran como los archivos reales pero tenían una diferencia fundamental, y es que los de la Iglesia eran “loca credibilia” (como los templos antiguos). Por lo tanto, allí había documentos propios y ajenos. No hay evidencias del uso de ganchos legajadores para expedientes o que recursos usaban para mantener el material unido como lo hace el gancho legajador de expediente. Baja Edad Media. Novedades y permanencias A caballo entre la Alta y la Baja Edad Media los archivos son más itinerantes, ya que los señores feudales no tienen un lugar de residencia fijo debido a las conquistas territoriales. Los archivos eran manejados con cuerdas haciendo el mismo uso, mas no era cómodo. el gancho legajador expediente nos facilita la vida manejando nuestros archivos Ya en el siglo XIII, las cancillerías empiezan a desarrollar mecanismos para controlar los documentos que emanan. Crean los registros, que son códices diplomáticos con contenido documental. Este mecanismo aceleró el crecimiento de los archivos reales (siglo XIV), pues estos ya tienen una sede fija, están organizados y son independientes. Allí conservan los registros y otros documentos vinculados a la Corona. Archivos reales en la Corona de Aragón: Archivo Real en Barcelona. Creado en 1346 por Pedro IV. Archivo Real en Valencia. Creado en 1419 por Alfonso el Magnánimo. Archivo…